He estado investigando y pensando cómo podía adaptar lo que había aprendido a lo largo de estos años sobre Montessori para aplicarlo lo máximo posible en casa con mis hijos de casi dos años ya que creo que es la mejor manera de aprovechar al máximo lo aprendido.
Todavía creo que mis hijos están en época de jugar, divertirse y descubrir todo, pero también pueden ir adquiriendo hábitos básicos de la vida práctica. Lo primero que he considerado básico ha sido aumentar en la medida de nuestras posibilidades su autonomía y la idea principal es adaptar todo para que esté a su alcance y necesiten nuestra ayuda lo menos posible.
Nada más entrar en casa tenemos una percha donde colgamos las chaquetas y los bolsos y un banco donde dejamos nuestros zapatos (los de mi marido y los míos), así que lo que hemos hecho es dejar sitio debajo del banco para que los niños coloquen sus zapatos nada más entrar a casa y puedan poner sus zapatillas. Ya que la percha que nosotros utilizamos no está a su altura, hemos comprado una percha para ellos y la hemos puesto a su altura, de modo que cuando entran a casa, lo primero que hacen es quitarse la chaqueta y colgarla en su percha y, acto seguido, quitarse los zapatos, ponerse las zapatillas de ir por casa y guardar los zapatos en el banco.
Por otra parte, en el salón es donde más tiempo pasan cuando están en casa. En el salón hemos vaciado las baldas más bajas de una de las estanterías modulares de modo que tienen el material ordenado y organizado a su altura para que ellos mismos puedan cogerlo y utilizarlo cuando quieran. También hemos adaptado su zona de comer, hemos colocado en una estantería con una cesta los cubiertos, vasos, platos y pechitos para que ellos mismos cojan lo que van a necesitar para comer y lo lleven a la mesa.
Por otra parte, los juguetes los hemos organizado del mismo modo en su habitación, para que estén separados del material y puedan acceder a ellos con facilidad cuando quieran.
Respecto al baño, hemos comprado unos taburetes para que puedan subirse hasta la altura del lavabo y lavarse las manos y los dientes cómodamente, aun así, también hemos habilitado la zona del bidé para cumplir con la misma función, ya que está más a su altura y pueden hacerlo cuando quieran (les encanta jugar con el agua).
Ya os iré contando más ideas ¿cómo lo hacéis vosotros? ¿os parece buena idea adaptar los espacios a las necesidades de los niños?
2 comentarios en
Sandra 22 octubre, 2015 9:41 pm
Me encanta tu blogdanses y tus ideas, intentaré aplicarlas. Lo que no se es mandarte un email privado, jeje
Patri 23 octubre, 2015 6:39 am
Gracias. Jijiji, no te preocupes, intento yo enviarte a esta dirección de correo un email, sino, arriba a la derecha en la página principal de la web, tienes dibujado un sobre, si le das ahi, me llega al correo 🙂
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